Ha bajado la marea suscitada no por la liberación de Ingrid Betancourt, sino por sus declaraciones. Pero ha quedado la estela de una suerte de gran acróbata del discurso. Al principio, idolatró a Uribe, a Santos y al ejército de su país, salvadores de patria al combatir guerrillas. Una forma de dar las gracias; lo pasamos. En el ínterin, hasta el presidente Chávez llevó palo del bueno, a quien se le daba las gracias pero se le decía entremetido en Colombia e irrespetuoso de la voluntad del pueblo neogranadino. Primeras impresiones. Mientras vuela a Francia −con desespero, se dirá−, sus amistades empiezan a piar: Clara Rojas, su compañera de fórmula presidencial, dice no reconocerla y estar hasta aburrida de su habladera. Esa locura mareante de lanzarse y no lanzarse nuevamente a la presidencia de Colombia. Esa ambigüedad que pareció no olvidar en la selva como arma dialéctica de la política. Cuando llega al país de la luces, cambia un poco sus baterías. Empieza a apalear al pobre Uribe, que ahora sufre con la competencia de poder que le plantea su ministro Santos. Empieza a reconstruir a Hugo Chávez, a quien pinta como una eficiente llave de influencia sobre la guerrilla. Habla de los otros secuestrados, dando a entender que había sido un desliz imaginarse que ella era lo último amarrado en las selvas. Empieza a entrar por el aro de la prudencia. ¿Como es eso de halagar lo que todo el mundo sabe que es falso de toda falsedad, como es la "democracia" que rige en su país, la parapolítica institucionalizada. Empieza a tener cuidos, y a recoger un poco sus palabras. Sin duda, parecía haber perdido actualidad y tino entre tanto monte. ¿Cómo es eso de apoyar bombardeos a países vecinos, como dijo, y hasta caer en declaraciones de corte doméstico, como decir que su compañera rehén quería ahogar a su hijo? ¡Vaya, Ingrid, si es por vida privada, vos la tenés también, como insinúa Clara, con el asunto del ex senador que huyó recientemente del país por miedo a que lo matasen cuando rindiera declaraciones en la Fiscalía!
LA ONU CONTRA LA HUMANIDAD
Hace 1 mes
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