El mundo fantasmagórico de Marcel Granier

Para reirse:  ahora Marcel Granier, el directivo de RCTV “Internacional”, llora a pierna suelta, viendo fantasmas por doquier.  Presuntamente ahora el responsable de que lo hayan sacado del aire, tanto de la señal abierta como del cable, es su competidor comercial Cisneros, un eterno envidioso de la gloria inmarcesible de RCTV.  Para uno de sus propios periodistas, explicó cómo fue que Chávez le pasó el brazo sobre el hombro al empresario para sacar una señal tan magnífica como la del canal a su cargo, dejando a disposición del magnate un espacio que ellos (RCTV) habían liderado durante 55 años.  Naturalmente, no menciona el acto de nacimiento del canal, bajo el contexto idílico de la dictadura de Marcos Pérez Jiménez, la cantidad de cierres a la que tuvo que ser sometido en la misma IV República por no acatar la normativa que rige las transmisiones de las televisoras ni las razones presentes que le acarrearon sanción, esto es, la violación de la Ley de Responsabilidad Social en Radio y Televisión, llamada “Ley Resorte”.  Para él, sumido en su delictuoso mundo de sopesarse por encima de las leyes venezolanas, hay conspiración por doquier, pertenezcan o no a su bando ideológico.  Alguien tiene que hacerle un llamado para que ponga orden en su cabeza y sintonice sus neuronas, ya sintomáticas de años:  ¿es un empresario metido a político o es un político metido a empresario? La recalcitrancia enloquece.