Ahora sí, la última: resulta que los jefes policiales implicados en ordenar matanzas a la Policía Metropolitana en los hecho de abril de 2002 dicen que la gente del Puente Llaguno (los "pistoleros") "no mataron a nadie" y que la marcha de la oposición no era nada pacífica, como se llenan la boca hasta ahora los habla-pajas de todos los tiempos de la oposición venezolana. Esto sí que está bueno, caballero. Y no es porque los tipejos policiales matagente estén diciendo ninguna verdad. Todo el mundo sabe que la gente del Puente Llaguno se defendía de ellos mismos, los policias y francotiradores; lo que sorprende es que ahora los señores polícias sumen a la oposición venezolana en el caldo de las inconsistencias mentirosas, cosa propia de ellos, de paso. ¿No y que tenían que morir manteniendo la mentira? Lo cierto del caso es que nadie les cree ni siquiera cuando dicen la verdad, y esto que ahora sueltan es una de esas grandes verdades, por más que lo hagan para lograr beneficios. También, lo cierto del asunto es que la parte acusadora tiene grabada las transmisiones radiales de mando donde los carajos quedan hundidos hasta más abajo del pavimento. Si tienen que pagar, que lo hagan. Aquí en Venezuela a nadie se condena a muerte para andar conmutando penas. ¡Que paguen, si la deben! ¡Que la ley no sea una letra que sólo tengan que pagar los pendejos!
LA ONU CONTRA LA HUMANIDAD
Hace 1 mes
2 comentarios:
Evidentemente los Policias presos, presos estan! ciertamente , existen evidencias de todo tipo que los señalan como delincuentes, pero, andan por estos caminos personas que vejaron, con insultos etc. a Ciudadanos y Ciudadanas de a pie, en Maracay, Edo,Aragua, el 11 Abr.02, en San Jacinto, un excelente vecino mio y Militar simpatizante del Presidente Secuestrado, fue vejado, rodeado por otros Militares retirados, inclusible denunciado por sus vecinos inventando falsos hechos,Este oficial el Capitan los perdono pues despues de casi 6 años, me dijo.ELLOS!ANDAN APENADOS NO ME MIRAN A LA CARA...QUE PENA ME DAN.
La verdad es que no puede haber mejor recompensa: la vergüenza del contrario. Pero en el caso de estos policias, con grabaciones de las transmisiones de mando, no puede haber perdón. Sería un precedente malísimo para alguien que luego se le acuse de algo mayor y más concreto, como genocidio. En mi opinión deben pagar y vérselas con sus fantasmas allá dentro de la cárcel. Por supuesto, cuando científicamente se les compruebe el delito. Yo hablo sobre ese supuesto, aunque en mi fuero interno, como muchos venezolanos, tengo mis certezas. No tienen excusa política porque son oficiales y, en todo caso, funcionarios que se deben a un reglamento y ética.
Saludos, anónimo.
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